Diputados y senadores del PSOE aplaudieron como vulgares lameculos durante tres largos minutos al Presidente, Pedro Sánchez, e lugar de criticarle por haber llevado a la ruina a su partido y haber perdido con estruendo las elecciones.
Todos esos diputados y senadores agradecidos, paniaguados y lameculos de Sánchez están pendientes de si volverán o no a figurar las listas electorales del PSOE ante los comicios del próximo 23-J. Indignos, parece como si no les quedase más remedio que pelotear a Sánchez, artífice de las listas para no perder el empleo y tener que irse al paro, ya que la mayoría de ellos no tiene oficio ni lugar donde colocarse como no sea lo que han hecho hasta ahora: vivir de la mamandurria política y del peloteo a su maltrecho jefe.
No obstante, en el seno del PSOE sí hay cierto movimiento crítico de los antiguos y auténticos socialistas que con todo rigor y razón responsabiliza a Sánchez del fracaso electoral y que se muestra absolutamente contrario a los pactos del Presidente del Gobierno con los independentistas catalanes, los filoetarras de Bildu y los populistas de Podemos. Son líneas rojas que, según dicen, no se pueden seguir traspasando.
Millones de españoles pudimos contemplar entre atónitos e indignados el aplauso de los diputados y senadores socialistas a su líder trapalón en lo que constituía una surrealista y esperpéntica actuación de una pandilla de lameculos…
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