Algunos ignorantes de izquierdas se hartan estos días de criticar a CEOE por haberse negado a instaurar el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) que ha implantado el Gobierno con los sindicatos a los que financia más y mejor que nunca.
Es decir, que el Gobierno de Sánchez ha adoptado con los sindicatos una medida que tendrán que pagar los empresarios, todos los empresarios, los del IBEX, las PYMES y los autónomos en la misma medida.
Esos mismos incultos e incultas e ignorantes se hartan estos días de criticar que las grandes empresas del IBEX, que sólo son 35, están obteniendo grandes beneficios. Beneficios -y esto nunca lo señalan- con los que retribuyen a millones de accionistas, muchos de ellos pequeños inversores.
En esta ocasión la CEOE ha tratado de defender fundamentalmente a las pequeñas y medianas empresas (pymes) y a los autónomos, proponiendo que el nuevo salario mínimo interprefesional (SMI) afectase con un escalado proporcionalmente a las empresas y de manera especial a las grandes compañías. Pero el Gobierno no ha hecho ni caso a los empresarios a pesar de que son ellos quienes tiene que pagar tal medida gubernamental.
Y es que esas empresas del IBEX son sólo 35, como digo, frente a las cuales hay 3.329.863 PYMES y 3.322.992 autónomos, que son los que fundamentalmente se oponen al nuevo SMI, porque sus finanzas estrechas no se lo permiten, teniendo en cuenta que un salario de 1.082. euros supone unos costes laborales reales para esos millones de empresas de 1.800 euros por contrato sumándoles las cotizaciones a la S.S. y a Hacienda. Y teniendo en cuenta también que son las PYNES y los autónomos quienes más han sufrido el aumento de costes de las materias primas y la inflación en general.
Así que resulta exigible un poco más de cultura empresarial para la izquierda política y mediática que no distingue entre las empresas del IBEX y los millones de empresas y autónomos que suponen el 95 por ciento del tejido empresarial español. Para ellos, ignorantes e incultos, todas las empresas son como las del IBEX-35 sin distinguir que son las únicas que cotizan en bolsa y están sujetas a sus continuos vaivenes.
Insisto. Abruma observar las críticas de la izquierda política y mediática y del propio Presidente del Gobierno al mundo empresarial en general y a sus beneficios sin tener en cuenta la realidad de que la economía española está integrada fundamentalmente por pymes y autónomos y sin tener en cuenta tampoco que los beneficios de las 35 del IBEX se destinan sobre todo a retribuir a los accionistas, en su enorme mayoría pequeños, personas individuales que mantienen en esas empresas, jugándosela, sus parcos ahorros.