Miles y miles de muertos en Ucrania. El sátrapa, invasor, Putin, continúa segando la vida en Ucrania, sembrando de cadáveres de hombres, mujeres y niños las calles devastadas de Kiev, de Járkov, de Mariúpol, invadiendo y .destruyendo esas bellas ciudades…
Mientras tanto, el Presidente de Ucrania, Zelensky, clama, clama y clama, pero lo hace en el desierto de quienes preferirían no oír su voz estéril y suplicante.
La vida es lo más importante, perderla es perder todo. Qué poco valen las vidas cuando lo que prima es la ocupación del territorio, su cruenta invasión. Y en el orden internacional se aprecia una vez más que algunas vidas importan menos que otras Que mueran injustamente pocos para que puedan vivir muchos… La responsabilidad se antepone a la justicia. De justicia sería defender a Ucrania con uñas y dientes. Pero no se puede defender a Ucrania por el peligro de una guerra nuclear. Ucrania no es miembro de la OTAN. Y si la OTAN atacase al ejército ruso, Putin, desquiciado, presionaría el botón nuclear.
Corredores humanitarios que no se respetan, que se bombardean. La mayor diáspora de refugiados desde la Segunda Guerra mundial. Las mujeres y los niños ucranianos huyen de las bombas despavoridos. Escasean el agua y los alimentos… Lo cuentan los periodistas que hacen una gran labor allí. Lo cuentan las ONG mientras realizan su labor humanitaria encomiable, lo cuentan los propios ciudadanos ucranianos convertidos en corresponsales de las cadenas televisivas…
La guerra de Putin sigue, porque sigue su endiablado y paranoico egoísmo, su afán imperialista, que nace del miedo atroz a no ser nadie. La diplomacia fracasa en su intento de paz, pero lo vuelve a intentar una y otra vez. Como debe ser.
Jóvenes soldados rusos hechos prisioneros que, engañados, piden perdón, otros que saquean las ciudades, mercenarios venidos de otras guerras para matar a los ucranianos…
Zelensky clama, y clama, incluso en los parlamentos de Canadá o de Europa. !Solicitamos desde Ucrania entrar ya en la UE… Enviénme aviones para cerrar el espacio aéreo. Ayuda, por favor, que el ejército del invasor, Putin, está masacrando a mi pueblo! ¡Invadir Ucrania es invadir Europa! Y su voz se pierde, una y otra vez, en el desierto de la sordera internacional…
El valiente y fuerte pueblo ucraniano -llantos ante las armas regaladas- resiste de forma increíble, los líderes de Europa y de EE.UU., envían ayuda humanitaria y víveres y algunas armas mientras, tristes e impotentes, miran para otro lado. Dicen que hacen lo que pueden para salvar vidas, las vidas que siempre importan. Y es así.
Millones de ojos esperanzados de todo el mundo puestos en la negociación de la paz…